Estamos en la constante búsqueda de grandes logros en todos los ámbitos de nuestra vida. Sin embargo, reconocer las pequeñas victorias y los éxitos de la vida cotidiana nos motiva continuamente y nos ayuda a seguir logrando estos grandes objetivos. Especialmente en situaciones como la que estamos viviendo, es importante reconocer y apreciar nuestro progreso, ya que esto nos hace conscientes de nuestras capacidades, es decir, las personas respondemos positivamente a los logros, por pequeños que sean, estos nos estimulan, motivan y también minimizan la procrastinación. Además, establecer un camino claro y definido hacia el éxito, nos permitirá concentrarnos en una cosa a la vez.